11
Estoy pagando en vida mi tributo
de muerte, y es la Muerte quien lo cobra.
Me arroja en el hondón de mi zozobra,
me deja en cueros, me apuñala en luto.
Si siembro esperas, me carcome el fruto,
tritura la simiente que me sobra;
en muerto vivo el préstamo recobra,
calienta mi mortaja en hueso enjuto.
Voy pagando en memorias y en olvidos,
en negaciones y desesperanzas
para atenuar su viento terco raro.
Arrincona los céntimos perdidos
y con cobre de viejas añoranzas
pare este muerto que, viviendo, amparo.