a Loli y Antonio Sánchez-Marín Enciso.
Yo vivo y soy poeta porque muero
en soledad sintiendo mi agonía,
porque renazco en mi melancolía
y nada ya de casi nadie espero.
Si pido auxilio, el corazón de acero,
de máquina, de hielo, negaría
auxilio al vivo muerto que pedía
carne de vecindad, mina de "quiero".
Que nada es ya querer, ni esa paloma
que al cielo sube desde mi corteza
en grito y desbandada de mi gozo.
Soy poeta y me muero. Ya ni asoma
ese roto muñón de mi tristeza.
¡Dejadme ahogarme en aguas de este pozo!