32
Para mi hijo Roberto
Apenas tiene
importancia que sufras;
es tan sólo una anécdota omitida
en anales exactos
que nos dibujan a la humanidad.
Pero tiene importancia:
que tu dolor es tuyo.
Aunque tan sólo sea
una olvidada línea
en la historia de un hombre
y que no se ha fijado por las crónicas.